El punto de partida

Quedan justo tres meses para el maratón de Madrid. Tres meses llenos de ilusión, nervios y muchos kilómetros.

Cada maratoniano o futuro maratoniano es distinto y cada maratón también lo es. No es lo mismo afrontar Madrid que Valencia y tampoco ir a hacer MMP o ir a disfrutar la ciudad 42K 195m. Por eso desde que decidí debutar en la distancia reina he tenido un plan personalizado por un entrenador. Hoy en día hay muchos, no son tan caros y los beneficios de un plan personalizado frente a uno genérico sacado de cualquier página de Internet son mas que evidentes.
El mio, por cuarta vez lo llevará Tamara Sanfabio. Y es que lo que funciona, mejor no cambiarlo (los maratonianos somos especialitos).

A estas alturas de película, tengo una manía. Evaluar mi punto de partida antes de empezar en serio el plan. Y para Madrid lo hago corriendo el último domingo de mes la MM de Getafe.
Me gusta poder comparar sensaciones para saber en que me tengo que centrar. Por ejemplo, si después tengo agujetas le doy importancia al fortalecimiento.
De esta forma sé que flojea y que en que tengo que centrarme mas.

Entrenar maratón me da mucha hambre y no precisamente de fruta. Así que otra costumbre que tengo es pesarme, medir porcentaje de grasa corporal... y fotografiarme. De esta forma puedo ver progresos y ver si en algún momento determinado me paso con mi "no dieta". Porque, lo siento, yo entreno todo lo que queráis pero lo de ponerme a régimen no va conmigo. Que yo si hago maratones, además de por la satisfacción de entrar en esa meta, es para comerme un jabalí cuando me apetezca. Aunque soy consciente que con un nutricionista mejoraría mi rendimiento y seguramente mis marcas.

Tres meses para mi cuarto maratón.
I'm ready!